Ingredientes
para 4 personas:
400 gr. de cabracho
ya limpio
(un pescado de unos
600/800 gr.)
4 huevos
2 cebollas
1 diente de ajo
1 puerro
2 zanahorias
½ pimiento verde
3 pimientos del
piquillo de lata o conserva
1 brick pequeño de nata
para cocinar (200 ml)
2 cucharadas de
tomate frito casero
Pimienta negra molida
Mantequilla
Harina
Aceite de oliva
Sal
Elaboración:
En primer
lugar ponemos al fuego una cazuela con abundante agua y preparamos un caldo con una
zanahoria, un puerro, una cebolla entera, un poco de aceite y sal. Debemos
dejarlo que cueza durante 15 minutos.
Lavamos muy
bien el pescado y lo ponemos a cocer en ese caldo unos 10-15 minutos (a partir de que
comience a hervir), sacamos, escurrimos y limpiamos muy bien de vísceras, piel
y espinas, reservando el caldo para otro guiso.
Pelamos y picamos la otra cebolla y la
ponemos a pochar en cuatro cucharadas de aceite, añadimos el ajo y la zanahoria
picados, y por último el pimiento, salpimentamos y dejamos que se haga a fuego
moderado.
Cuando lo
tengamos todo bien pochado, añadimos el pimiento del piquillo y dejamos unos minutos para que se
confite un poco, bañamos con la nata y el tomate frito, mezclamos bien y apartamos del fuego.
Disponemos el pescado ya limpio y
desmenuzado junto con el sofrito en el vaso de la batidora o (de la Thermomix o la
My Cook si la tenemos, incorporamos los huevos y trituramos el conjunto -debe quedarnos
una pasta muy fina- probamos y rectificamos de sal y pimienta.
Precalentamos el horno a 180 ºC
Untamos un molde
alargado (tipo plum cake) con mantequilla y espolvoreamos con un poco de harina. Echamos la mezcla
del pescado, tapamos con papel de aluminio y horneamos al baño maría unos 30/50
minutos a 180º para lo cual ponemos un
poco de agua en la misma bandeja del horno y colocamos nuestro molde encima. Comprobamos
si está hecho pinchando con una aguja de tejer o un pincho de brochetas que
debe salir seco.
Sacamos del
horno, esperamos a que se enfríe, desmoldamos y adornamos al gusto.
Servimos como
plato principal acompañado de una ensalada verde o como aperitivo para untar en
unas tostas de pan crujiente.
NOTA.- Esta receta no es la original del maestro de maestros, Juan Mari Arzak, que ha dado la vuelta al mundo, sino una de las muchísimas versiones que existen de la misma.
Podemos
hacerla con otros pescados, mejor si son de roca por aquello del saborcillo a
marisco, pero admite cualquiera otro sea blanco (merluza, lubina, lenguado) o
incluso azul (atún, bonito), es más podemos hacerla aprovechando los restos de
un pescado al horno, cocido o la plancha sin problema.
De lujo.........me encanta...............un bico
ResponderEliminarMuchas gracias Roski un beso.
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