Ingredientes para 4 personas:
4-6 dientes de ajo
(según tamaño y gusto)
1/3 de una barra de pan normal
1 cucharadita de pimentón
dulce de la Vera
2 huevos frescos
1 litro de caldo de pollo
(se puede sustituir
con ½ pastilla de caldo disuelta en 1 litro de agua)
5 cucharadas de
aceite de oliva
Preparación:
Pelamos y laminamos
los ajos y los ponemos a dorar a fuego suave en una cazuela amplia con las 5 cucharadas de aceite,
moviéndolos para que se hagan por igual.
Tan
pronto empiecen a tomar color, añadimos
las rebanadas de pan cortadas lo más finamente posible y dejamos que se empapen
con el aceite y se tuesten muy despacio, sin dejar de dar vueltas con una
cuchara de madera, hasta que estén doradas.
Una vez dorado
el pan, retiramos la cazuela del fuego y añadimos el pimentón. Mezclamos bien
y mojamos con el caldo caliente o en su defecto con media pastilla de caldo
diluida en un litro de agua hirviendo). Volvemos a poner la cazuela en el fuego
y dejamos que se haga la sopa a fuego lento (no debe llegar a hervir)
removiendo con una cuchara de madera para que el pan se empape y se vaya
deshaciendo para que espese la sopa.
Cocinamos a
fuego moderado con la cazuela semi tapada durante 15-20 minutos, removiendo de
vez en cuando.
Finalmente
añadimos los huevos previamente batidos, mezclamos, apagamos el fuego y dejamos
reposar la sopa unos minutos antes de servir para que el pan termine de
inflarse y ligue la sopa.
Servimos bien
caliente en cuencos o cazuelas de barro.
NOTA.- Si queremos darle un toque picante podemos añadirle una
guindilla o usar pimentón picante. Hay quien le añade unos taquitos
de jamón serrano, que se rehogan al principio junto con los ajos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario