Ingredientes:
5 membrillos (aproximadamente
un kilo)
1 limón
Azúcar (600 gr. por
cada kilo de membrillo)
Preparación:
En primer
lugar lavamos muy bien los membrillos y los ponemos a cocer a fuego medio en
una cazuela de fondo grueso, cubiertos por completo de agua, a la que habremos
añadido el zumo y la piel del limón.
Cuando los
membrillos estén blandos (tardarán una media hora a partir de que el agua
empiece a hervir) los sacamos, escurrimos y dejamos que se enfríen a
temperatura ambiente.
Cuando estén
fríos, los pelamos y partimos en trozos, sin apurar mucho la zona del corazón,
ya que es donde más amarga y más semillas tienen.
Pasamos toda
la carne por un pasa purés y lo molemos lo más finamente posible.
Una vez
tengamos toda la pulpa triturada, la pesamos y añadimos azúcar. La proporción
depende del gusto de cada cual, hay quien pone la misma cantidad de azúcar que
de fruta, pero bastan 600 gr. de azúcar por cada kilo de carne de membrillo
triturada.
A continuación
volvemos a poner el membrillo junto con el azúcar en la cazuela y cocinamos a
fuego suave sin parar de remover con una rasera de madera, para que no se nos
pegue y vaya reduciendo (con cuidado porque salpica y quema).
Estará listo,
pasada una hora aproximadamente, podemos
comprobarlo poniendo en una cucharilla de metal fría un poco de carne de membrillo
y si al volcarla sobre un platillo cae
de golpe es que aún necesita más cocción, estará lista cuando resbale
lentamente.
Terminada la
cocción, disponemos la mezcla en moldes y dejamos enfriar sin taparlos a temperatura
ambiente. Una vez fríos los ponemos en la nevera durante al menos 24 horas para
que termine de cuajar bien la carne.
Servimos la
carne de membrillo partida en pequeñas porciones. Podemos acompañarla con queso fresco.
A mi me viene ya preparada y envasada de Toledo, pero vamos la utima foto vuelve a mirar que me lleve dos porciones...!!!
ResponderEliminarBesos
Nosotras también lo publicamos! Está muy rico!!
ResponderEliminarhttp://juegodesabores.blogspot.com.es